CHICO LÓPEZ NARVAEZ

Las aficiones, dada su parte de pasional o biológico que tienen, conlleva sus periodos de iniciación, evolución, sus crisis, crecimientos y como todo lo que proviene del hombre sus vaivenes, mucho más si es en una afición, como es la pintura, que contiene un proceso de creación artística. Hay periodos que por cualquier tipo de circunstancias, las musas nos abandonan y el artista es incapaz de reproducir cualquier contenido, es la maldición del folio en blanco para el escritor, o del pincel limpio para el pintor.

  Por otra parte, son los periodos de crisis colectivas (siglo de oro español, generación del 98, etc) o personales (Goya, Van Goth, Picasso…) donde se puede dar la catarsis de fundirse las dos tendencias: por una parte de una inspiración total y por la otra de no saber plasmar las ideas  de forma material;  es el tira y el afloja entre el quiero y el no puedo, entre el gin y el gan. . Es en los periodos que nos creemos bajos de nuestras vidas, cuando el artista puede sacar lo mejor que lleva dentro de sí mismo, no es un periodo de paz pero si de creación...

Os dejo con unas imágenes de las obras de Chico López Narváez, mi primo.