La
Consejería de Educación, Cultura y Mujer de Ceuta celebra el Día Internacional del
Jazz con la actuación de Hailey Tuck, una cantante texana de tan solo 24 años
que se ha convertido en depositaria de la mejor tradición jazzística de los
años 30 del siglo XX, aquellos en los que empezaban a deslumbrar las inmortales
Billie Holiday y Ella Fitzgerald. Su voz –y hasta su ropa- se sitúa entre la de
las dos divas y la de su compatriota de origen ruso Regina Spektor, como podrán
comprobar quienes se acerquen al Teatro
Auditorio del Revellín el sábado 25,
para cuando está fijada la actuación de la
estadounidense.
Nacida y criada en Austin, Texas, con una educación de una familia baptista y militar, Hailey Tuck es una cantante de jazz de tan solo 24 años que ha tenido una vida poco corriente. En su 18 cumpleaños, sus padres le regalaron un fondo universitario para desarrollar su educación. Ella hizo lo que cualquier adolescente enamorada del jazz de los años 30 haría, se compró vestidos vintage y como Edith Piaf habría hecho, compró un billete de avión de ida a París, sin vuelta. Hailey llegó a París una mañana temprano, y se subió a un taxi que le llevó a Voltaire, una emblemática zona de la ciudad.
Pasando sus
días en tiendas de ropa vintage y de discos, y sus noches cantando en los bares
de jazz, Hailey se estableció rápidamente como una de las favoritas en la
escena underground. Vestida como si fuera un personaje en una novela de F.
Scott Fitzgerald, con una embaucadora voz que se sitúa entre Billie Holiday,
Regina Spektor y Ella Fitzgerald, Hailey cautivaba a su audiencia con clásicos
como “My Funny Valentine”. Aunque también sorprendía con su única
interpretación en temas como “Tell Him No” de The Zombies, “Don’t think twice”
de Bob Dylan y “Sunday Morning” de Maroon 5.
Con una
nueva confianza ganada en su aventura parisina, Hailey estuvo presente en
abundantes noches de los clubes de jazz en Austin, llegando a ser invitada al
legendario Elephant Room.








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