jueves, 30 de marzo de 2017

LOCAS DE ALEGRÍA


Loca  de Alegría es una de las películas del año, con una fuerza desgarradora, un extraordinario humor no desprovisto de ironía, unos planos de lujo en bañados por la maravillosa fotografía de los atardeceres italianos

Valeria Bruni Tedeschi (en el mejor papel de su carrera) y Micaela Ramazzotti son dos mujeres que las circunstancias de la vida han hecho coincidir en el lugar más inapropiado, un hospital psiquiátrico con techo de villa burguesa en una Italia, que como define su director, no más que otro manicomio a cielo abierto. Para interpretar a Beatrice, Valeria Bruni Tedeschi se ha inspirado del personaje de Blanche DuBois de Un tranvía llamado deseo. Una persona que se protege de la dureza del resto de los personajes que la rodean con una mezcla de locura e imaginación para proteger su fragilidad. Beatrice es extrovertida, cotilla, exagerada, exuberante y tierna, y la actriz se balancea de un estado al otro con una elegancia y certeza de poner los pelos como escarpias. Y como Blanche, siempre ha confiado en la bondad de los desconocidos (solo que Beatrice conoce a todo el mundo, por lo que poca bondad le queda por descubrir).Donatella, Micaela Ramazzotti, es todo lo contrario. 
Introvertida, nostálgica, amargada, triste y soñadora. Una actriz que con su mirada puede expresar todo el dolor del mundo. Un dúo explosivo, ya en el manicomio, pero mucho más radical y emocionante cuando decidir escaparse de él y arreglar unas cuantos asuntos pendientes desde hace tiempo. Del internado forzado a la libertad total, entre juego, riesgo y la asunción de un pasado difícil de recobrar.

Definida como la Thelma & Louise italiana, Locas de alegría ha cumplido las expectativas en los premios de la Accademia del Cinema Italiano, que la han coronado como mejor película del año, además de otorgarle las distinciones de mejor actriz(para la genial Valeria Bruni Tedeschi,, además de  diseño de producción, peluquería y realizador. Nos hallamos ante el primer David di Donatello a mejor director recogido por el siempre interesante Paolo Virzì.


Pese a partir de 17 nominaciones, Locas de alegría no ha sido  el filme más premiado de esta competitiva edición, honor compartido por la fábula Indivisibili, de Edoardo De Angelis, y el drama automovilístico Veloz como el viento, de Matteo Rovere, que partían a su vez de 17 y 16 nominaciones, respectivamente, y se han alzado con seis premios cada una.

 Carlos Boyero dice en su crítica de El País: …sus dos protagonistas lo están a veces, pero también están locas de desesperación, acorralamiento, soledad, pérdida, miedo. Una de ellas es un ciclón, agotadora, tragicómica, un volcán verborreico, siempre acelerada, aristócrata en la ruina aunque clasista, finalmente, asumiendo su bajón y su desamparo. La otra perdió lo que más amaba, está desolada, pero se dejará enganchar por su compañera en una huida vertiginosa hacia ninguna parte. Es muy trágico lo que cuenta Virzì, pero lo hace con gracia esperpéntica, con ternura contenida, huyendo de la sensiblería en situaciones que se prestan a ello. La esquizofrenia, la bipolaridad, la psicosis, pueden ser aterradoras, pero él se las ingenia para hacernos reír o sonreír con el disparatado viaje de sus tronadas, las visitas a sus desquiciados familiares, la necesidad de buscarse el pan dando palos jocosos. También ofrece la posibilidad de que nos asalte una lágrima furtiva en su emotivo final. Es una película bonita, vital, imaginativa, desgarrada, alegre y triste.

…la interpretación verdaderamente grandiosa es la de esa señora volcánica y guapa, sexy, desprendiendo clase y formidable actriz llamada Valeria Bruni Tedeschi. Su personaje es de una intensidad que podría atacarte los nervios, pero es imposible que te desentiendas de ella en ningún momento. Te divierte y también la compadeces. No sabemos qué ocurrirá con ambas. Dudo que recuperen la cordura, suponiendo que alguna vez la tuvieran, pero sospecho que el calor mutuo que se otorgan va a durar. El precioso plano final y la sonrisa que aparece en sus rostros lo hacen presagiar.
















No hay comentarios:

Publicar un comentario