martes, 31 de marzo de 2020

CORONAVIRUS: VENTANAS DE CINE


Sophia saluda alegremente desde la ventana del Festival de Cannes
Estos días estamos viviendo situaciones inesperadas por la expansión en todo el mundo del COVID-19. Y es ahora cuando muchos estamos descubriendo a quienes viven a nuestro alrededor y vemos cómo el talento y la creatividad de muchos acompañan a otros en el día a día, haciéndolo más llevadero y agradable. Nuestro rato de ocio tiene una cita todos los días a las 8 de la tarde.
En las oscarizada Parásitos empieza y termina con la misma escena desde la ventana de la casa.
En "Como casarse con un millonario" Marilyn utiliza la ventana para escapa al igual que en IDA.

Y es que desde S. Moda de El Pais, o Carlos de Amor para terminar la 2ª edición del Telediario, nos han mostrado algunas VENTANAS Y BALCONES DE CINE. Aquí va mi elección:

Emma Watson y sus hermanas se asoman a la ventana en la última versión de Mujercitas, mientras una jovencísima Scarlett Johansson contempla  Tokio en Lost in Translatión. 


la ventana como símbolo y como metáfora es un elemento que se viene empleando en todo tipo de manifestaciones artísticas desde tiempos remotos. Especialmente en las artes plásticas, constituye un motivo visual de estética poderosa: una clara dialéctica entre dentro y fuera, uno y el mundo exterior. En el cine, las ventanas a menudo integran ese simbolismo en el argumento de una manera mucho más sutil y pasan inadvertidas a nuestra mirada sin dejar de ser esa apertura en la pared en la que ficción y realidad se acarician a ambos lados de un cristal.
Nicole Kidman mira con miedo al exterior en Los Otros, mientras Jennifer Aniston en Lio en Broadway parece que se quiere tirar, mientras Alex (Malcolm McDowell‎) sufre su reclusión en la Naranja Mecanica.

¿Cómo olvidar a Audrey Hepburn sentada en el alféizar de la ventana y cantando Moon River en Desayuno con diamantes?

 El séptimo arte nos ha regalado escenas míticas que en mayor o menor medida tienen a la ventana como elemento protagonista.
Sid City y Blue Jasmine   
Las ventanas forman parte del paisaje de muchas de las historias que hemos vivido a través de la ficción. Pequeños agujeros en la oscuridad, tan similares a la pantalla de un cine que en más de una ocasión y, sin darnos cuenta, nos han dado miedo o provocado un suspiro de esperanza, como a muchos de los protagonistas de estas películas que incluyen ventanas.


Pepe Isbert, desde el balcón del ayuntamiento en Bienvenidos MR Marshall, Carmen Maura en Mujeres…, desde su fabulosa y colorida terraza, al igual que las monjitas de Entre Tinieblas, la sensación de claustrofobia de La Trinchera Infinita  y El Espíritu de la Colmena, en representación del cine español. 

Rod Taylor en Los Pájaros y Jean Gabin en el Muellas de las Brumas. 

Kim Basinger, en “Nueve semanas y media” le hacía caso a  Joe Cocker:  you can leave your hat 

 “Una habitación con vistas” a la bella Florencia, Bond sale a su balcón de Londres, y en Centauros del Desierto miramos el Monumental Vallay de John Ford.

 Estaba claro que el tío Alfred si le gustaban las ´ventanas, sobretodo, indiscretas en sus películas. 
 
Marilyn se despide de nosotros hasta mañana a las ocho-












CORONAVIRUS. LA PLAGA



Arnold Böcklin fue un pintor suizo de medidos del siglo XIX, encuadrado en el movimiento artístico del simbolismo de gran influencia en el posterior movimiento surrealista. Quizás su obra más conocida sea la misteriosa Isla de los Muertos.


“La plaga o La Peste¨ (1898  Kunstmuseum  Basilea) . Es un ejemplo de la obsesión del artista con las pesadillas de la guerra, la peste y la muerte. La pintura muestra a la Muerte paseándose sobre un dragón  alado por las calles de una ciudad medieval. Una alegoría de la oscura y desfigurada muerte, provista de su terrible guadaña, cabalga a lomos del dragón, mientras va segando la vida de quien la encuentra a su paso por las calles de una lúgubre población en medio de una tenebrosa y aterradora atmósfera. La muerte es la gran vencedora, siendo su poder superior a la vida y al saber de la humanidad.

lunes, 23 de marzo de 2020

CORONAVIRUS EN LA HORA EXTRA (Cadena SER)



El otro día escuchando “la Hora Extra” (Cadena Ser), el programa que conduce  Marta García lo titulo “¿cómo estáis? Hablamos”, terminaba con un pensamiento  sobre el dichoso COVID-19


Emma Valleespinos hoy reconoce que siente nostalgia de sí misma, de la que era  hace unos días…




Lo voy a contar,  siento  unos celos intensos hacia mí misma, de la que era hasta hace algo más de una semana. Me asaltan afiladas punzada en el estómago a las ocho y media de la mañana al evocar el modo exacto en el que me ponía el abrigo y salía de casa con prisa. Me corroe la rabia viéndome  salir por la puerta,  tocándolo todo con la insolencia de entonces… el botón del ascensor, la puerta del portal,  la del metro, dándole la mano mis hijos sin sentir el cosquilleo de un millón de bacterias organizando fiestas enfermizas entre  las falanges de los dedos.  Me llevan los demonios al fantasear con el café con leche del bar de al lado del colegio. Cuando me veo descerebrada hurgando entre las monedas de mi cartera, cogiendo otro metro ,llegando al trabajo, tocando teclados, puertas, dando dos besos, acercándose tanto a todos, para después rascarme  la cara sin sentir el peso de la culpa.
Abre los ojos. Alejandro Amenabar 
Fotos de Madrid Ignacio Pereira 

Nos estamos acostumbrando, qué remedio, a esta vida distópica que transcurre entre un lavado de manos y otro, a que lo mejor del día sea ir a comprar el pan con guantes de látex, a mirarnos con recelo al cruzarnos con alguien, a medio infartar al distinguir a través de las paredes una inquietante tos seca en el vecino con el que coincidimos en el portal hace un rato. Condenados a la hipocondría,  a la angustia, a conjugar la vida en modo subjuntivo.

Pero el otro día tumbada en el sofá, rebozada en mantas, viendo capítulos viejos de Friends y engullendo chocolate, me vi poco atormentada como para estar viviendo el fin del mundo. La hecatombe se parecía poco a mi nevera llena, la calefacción encendida, la señal de wifi a tope, y el gatuno placer de no estar haciendo nada útil. Habrá que arrancarnos el miedo, la congoja,  también la nostalgia permanente de  seguir un día y  otro y los que estén por venir, decirle a la vida con el tono hipnótico que usamos para ciertas cosas que se prepare para el día que volvamos a la calle.








NACE EL CINE



El 22 de marzo de 1895, Auguste y Louis Lumière presentaron en la Sociedad para el Desarrollo de la Industria Nacional de París la primera película rodada con el cinematógrafo, un aparato patentado por ellos mismos que servía como cámara y como proyector. Los asistentes a esta reunión pudieron ver una película en blanco y negro, rodada tres días antes, que mostraba a un grupo de obreros en el momento de salir de la fábrica de la familia Lumière.

A diferencia del voluminoso quinetoscopio que había presentado Edison un par de años antes, pensado para un uso individual, aquella tecnología permitía a muchas personas ver a la vez una misma proyección. Es por ello, que aunque la breve película-documental de los hermanos Lumière no sería, técnicamente, la primera de la historia, sí que supuso realmente el punto de partida del cine tal y como lo conocemos hoy en día, proyectado en una sala y visionado por muchas personas a la vez.


La primera sesión de cine abierta al público se considera que tuvo lugar a finales de ese mismo año, el 28 de diciembre de 1895, en el Salon Indien du Grand Café de París. Aquel día se pudieron ver diez películas mudas de menos de un minuto de duración, en blanco y negro.

domingo, 15 de marzo de 2020

CORONAVIRUS 2. ESPACIOS VACIADOS

"La realidad imita el arte" Oscar Wilde ("la decadencia de la mentira")

 En este fin de semana, hemos observando como nuestras calles, parques y jardines, cines teatros campos de futbol etc., se han ido vaciando, demostrando que la población es más cívica que el gobierno que nos gobierna.

 Así que no nos queda otra que obedecer el R.D. del estado de alarma,  y es tal la obediencia ciega y el miedo que nos crea el coronavirus dichoso, que incluso la infanta Margarita y sus Meninas;  el mismísimo Cristo, bajándose de la cruz y separándose de sus apóstoles (la distancia era inferior a un metro); el toro y los represaliados del Guernika; también , y era lógico pensarlo por parte de los fusilados, no tanto por los verdugos del 3 de mayo ; los ocupantes de la Balsa de la Medusa; la mismísima diosa Venus y Arecne; … todos hemos demostrado nuestra disponibilidad a pasar aislados estos quince días y nos hemos marchado cada uno a su casa
 De los aquí presente ninguno asistimos ni a manifestaciones ni carreras, por lo cual, que sepamos, no estamos contagiados. María ante su estado de  buena nueva a preferido aislarse también y no someterse a las pruebas.















 Muchas gracias D. José Manuel, por haber podido retratar la realidad en estos momentos críticos.  Por cierto Alejandro desde su ventana de la Gran Vía, ha abierto los ojos y nos manda por el grupo de watsa estas fotos.



José Manuel Ballester (Madrid, 1960) lleva más de  una década desarrollando su proyecto Espacios ocultos, un sistema de vaciamiento de obras emblemáticas de la Historia del arte a las que priva de personajes, animales y cualquier elemento que interviene en la acción. ¿El objetivo? Recuperar íntegro el escenario, el lugar donde las cosas suceden

9 de febrero ES POR TU BIEN

9 de febrero ES POR TU BIEN