Cuando
por diferentes motivos, como pueden ser los laborales y personales, no
encontramos las diferencias y las señas de identidad de las estaciones, cuando el tiempo nos
parece siempre el mismo, debemos de buscar los suficientes motivos para hacer
del verano una estación de lo que siempre ha sido, un tiempo de descanso, de
lectura, de pensar en nuevos proyectos, en programas esos imposibles y posibles
viajes, en el reencuentro y la charla reposada con los viejos y nuevos amigos sobre los transcendentes temas sin
importancia, pasar la consiguiente Feria en La Calabaza, tomar el sol (de doce
a dos) en la playa de la Ribera, o comer
unos pinchitos
Durante
muchos años atrás el verano ha sido el tiempo de los conciertos al aire libre,
donde la noche se hace más agradable, escuchando y participando de la música
del grupo o cantante que sea asequible de ver ese verano, Joaquín Sabina, El
Último de la Fila, Mana, Manolo García, Los Secretos, el estreno de Aida por
Gioseppe Verdi, etc., y este año le ha
tocado el turno a un, ya no tan joven,
Leiva –semiPereza- en el Baluarte de la Candelaria de Cádiz. Un buen motivo
para sentirme que estoy en verano con la compañía de unos buenos amigos.
Para presentarnos Pólvora (Sony Music
2014), su segundo disco en solitario, un trabajo que ha obtenido muy buenas
críticas desde todos los ámbitos. Y no lo hacía solo. Le acompañaba sobre el
escenario la Leiband, siete músicos que en su mayoría, a excepción de su
hermano Juancho (cantante de Sidecars) y Bruno, el batería, son los
mismos que acompañaban a Pereza.
Un abanico de público de edades muy variadas, desde
los fieles seguidores de Pereza, los amantes del rock&roll,, hasta las fans
que le siguen desde Antequera, y que entretienen a los amigos, llenaba el recinto de la Candelaria y esperaban
expectante en el bar el comienzo.
Pocos minutos después de la hora prevista salían al escenario uno a uno los
músicos y daba comienzo el concierto con “Los cantantes”, la canción que abre Pólvora,
continuando sin pausa con “Nunca nadie”, de su anterior trabajo Diciembre.
Da igual si te gustaba Pereza o no. Da igual si te gusta la carrera
de Leiva en solitario, porque al final, esto va de rock and roll: Leiva juega a
esto desde hace ya algunos años
El público tenía ganas de Leiva,
y se notó desde el principio, entregándose en cada una de sus canciones,
acompañando en los estribillos con verdadera pasión, y aplaudiendo
entusiasmados cada uno de sus temas. Y Leiva correspondió a ese entusiasmo con
la misma entrega. Ya desde el comienzo con Los cantantes, el madrileño
dejaba muy claro que no estaba ahí arriba para hacer el gamberro como
antiguamente, y que la formación que le acompañaba nos iba a dejar a todos con
la boca abierta,
Cierto aroma stoniano en el fraseo de ‘Mi Mejor
Versión’ fusionado con cierto aire Beatles en el estribillo.
Con la divertida y bailable
“Superhemanas” llegó el momento de presentarnos a cada uno de los músicos de la
Leiband, El público, como era de esperar, reclamaba enérgicamente su regreso, y
tras una breve pausa salió Leiva, solo, con su guitarra, para cantarnos la
emotiva “Vis a Vis”, haciéndonos vivir el momento íntimo de la noche.
Hacia el final de la
canción entraron el resto de los músicos, para poner el punto final con
“Terriblemente cruel”, el primer single de Pólvora, y la preciosa “Lady
Madrid”, despidiéndose ahora sí, entre acalorados aplausos y silbidos que
siguieron resonando incluso después de abandonar el escenario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario