"El corte de su pelo rubio es fundamental. El peluquero lo mide con una regla para que tenga una longitud de seis centímetros, ni más ni menos. Me voy a quedar con este estilo hasta el final. Ronnie Wood [guitarrista de los Rolling Stones] y yo lo empezamos y acabaremos con él", relata. Rod Stewart (Londres, 70 años) es tal y como uno se imagina. Galante, divertido y presumido, a parte, de cómo buen escocés, muy tacaño.
Roderick David Stewart nació el 10 de enero de 1945 en Highgate, Londres. Su sueño fue ser jugador de futbol, alentado por su padre, e incluso llegó a jugar en las secciones inferiores del Brentford.
Se desilusionó al no tener ninguna oferta para hacerse profesional. Por ello, dejó el futbol para dedicarse a la música y, concretamente a la guitarra, con la que recorrió Europa.
El viaje concluyó al ser arrestado en España por vago y el cónsul británico le envió de regreso a Inglaterra. Nuevamente en Londres y con la suerte maltrecha decidió armar su propia banda.
A finales de los 70, y durante los 80, "Da ya think I"m sexy?", "Tonight I"m yours" y "Passion", lo definirían como compositor. Dejó sus raíces olvidadas y se pasó a la música comercial y de discoteca. “Mis canciones son muy simples y directas, sin mensajes ocultos. Comparo componer a tener una antena por la que bajan las ideas. Cuando acabo, zanjo el asunto”. Esa alergia a mirarse al ombligo, esa tendencia a quitar importancia a su trabajo, ha propiciado su fama de artista poco serio.
En su lista discográfica, ha grabado clásicos populares estadounidenses en su serie "The great American songbook", con cuatro discos donde versiona temas populares de la música popular, Reposicionado como clásico, el cantante se sintió autorizado en este material para interpretar cualquier cosa, porque tiene el oficio para hacerlo.
En 2006 sacó un disco de covers de clásicos del pop y rock de todos los tiempos, disco éste que debutó en el nº 1 de los rankings con canciones destacadas como "if not for you" "crazy love" o el hit "have you ever seen the rain?", el cual fue lanzado como el primer sencillo.
Fue cauto y temeroso con el mundo de las drogas y el alcohol. “ Lo he pasado estupendamente y los 60 fueron tremendos, pero no repetiría. No voy a volver a cantar en pubs". Ahora prefiere el casino Caesar's Palace de Las Vegas, donde comparte residencia tres veces al año con Elton John o Céline Dion. Su afición a los coches deportivos, al fútbol, a los trenes de juguete y, por supuesto, a las mujeres. Todas cortadas por el mismo patrón: espectaculares, altísimas y preciosas chicas rubias, un ramillete de modelos, actrices y conejitas de playboy. La debilidad de Stewart. Desde que descubrió que no había mejor afrodisiaco que un micrófono en el escenario, entre él y un escarceo no hubo obstáculos.
De gira compartiendo habitación con su amigo Ronnie Wood, la estrechez de espacio se solucionaba olvidando el pudor. El invento terminaba más en jolgorio cómico que en orgía, aunque las chicas no se quejaban. Más tarde conquistó a una colección de mujeres espectaculares.
Stewart ha grabado 25 discos de
estudio y vendido más de 150 millones de copias, posicionándose como el artista que más ha vendido en la industria. Entre todas sus canciones, 31 han estado dentro de los top 10 en diversos rankings.
Según una encuesta realizada por la revista Q Magazine está en el número 33 dentro de los 100 mejores cantantes de toda la historia.
Padre de ocho hijos de cinco mujeres distintas, en su biografía dedica un capítulo entero al arte de criar niños. Su vástago menor, de 2 años, tiene prácticamente la edad de su nieta (fruto de la relación de su hija Kimberly con el actor Benicio del Toro) sigue implicado en la crianza. "Lo disfruto tremendamente", comenta entusiasta. "Prefiero no quedarme en hoteles caros y estar en casa cada mañana". Para un vividor como él, sin duda una prueba de amor entregado.
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