El Palacio de la Música, construido en
1926 por Secundino Zuazo, es uno de los edificios emblemáticos de la Gran Vía,
una calle donde se han dado cita los madrileños durante generaciones para
disfrutar en común de la cultura: el cine el teatro, los conciertos, los
musicales. La Gran Vía tenía hasta fechas recientes 13 cines, hoy solo quedan
tres. El cierre de los cines responde en buena parte al auge de la
piratería audiovisual que goza de una gran impunidad ante la pasividad de los
responsables públicos. La crisis económica y el desproporcionado aumento de
impuestos como el IVA, que se ha triplicado en el caso de cines y teatros,
amenazan la continuidad de los espacios culturales madrileños. Los poderes
públicos pueden hacer mucho para salvar los cines y los teatros de Madrid.
Bastaría con que dejasen de asfixiarlos económicamente y con que hiciesen leyes
que protegieran de forma inequívoca los derechos de autor. Madrid ha perdido en los últimos años
la gran mayoría de los cines y varios teatros. No podemos perder uno de
nuestros mejores auditorios culturales como es el Palacio de la Música, que
debe seguir siendo un lugar de encuentro y disfrute de la cultura para las
generaciones sucesivas.
Campaña de Firmas: Salvaguardemos el
uso exclusivamente cultural del Palacio de la Música @SolodelaMusica
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